lunes, 9 de agosto de 2010

Exponen 45 grabados de Honore Daumier en Museo Nacional de la Acuarela

Daumier fue uno de los primeros caricaturistas e ilustradores del siglo XIX. Llegó a ser temido por los gobernantes, quienes preferían enviarle obsequios para no aparecer en sus trabajos

Con 45 verdaderas joyas de la litografía universal, propiedad del Museo Nacional de la Estampa, fue inaugurada ayer en el Museo Nacional de la Acuarela la muestra “45 Grabados de Honore Daumier"

Se trata de piezas que fueron donadas en 1999 por el maestro Alfredo Guati Rojo y su esposa, luego de haberlas adquirido poco a poco en varios viajes a Europa, explicó a Notimex Beatriz Gaminde, directora del Museo Nacional de la Acuarela.

En entrevista previa a la inauguración, Gaminde recordó que el francés Honoré Daumier (1808-1879) fue uno de los primeros caricaturistas e ilustradores de su época; fue pintor, grabador e incluso acuarelista, y, en su tiempo llegó a ser uno de los más importantes ilustradores de los periódicos parisinos.

El artista llegó a realizar alrededor de cuatro mil trabajos, todos editados o publicados en los más diversos medios impresos de información de la Francia del siglo XIX, de ahí que esta pequeña colección de caricaturas y grabados, que se presentan son verdaderamente tan importantes en su tipo.

Los diarios parisinos donde con más frecuencia apreciaban sus trabajos eran L`Caricature y L`Charivari, ya desaparecidos.

Incluso, afirmó la maestra, en la muestra que se presentó en el Palacio de Bellas Artes de esta ciudad, en los años 80, se mostraron varios ejemplares de estos rotativos, propiedad de coleccionistas anónimos, que enriquecieron entonces esa magna exposición sobre el artista francés.

Sobre la actual exposición, agregó que ésta permite al visitante darse una idea de la forma en que este destacado dibujante, ridiculizaba a la sociedad de su época.

Daumier, dijo, llegó a ser temido por los gobernantes y diversos dirigentes, quienes preferían enviarle obsequios para no aparecer en sus trabajos.

Sobre la aportación del maestro Guati Rojo y su esposa Berta Pietrasanta, explicó que desde los años 80 comenzaron a donar una serie de más de 160 piezas de arte de grandes artistas del grabado y la acuarela, entre ellos, de los maestros Santiago Hernández y José Villasana.

Guati Rojo, señaló, fue un coleccionista de arte y desde sus inicios en el manejo de la técnica de la acuarela comenzó a reunir piezas que a su parecer eran interesantes e importantes.

Recordó que durante la firma del convenio-préstamo para la actual exposición, el director del Museo Nacional de la Estampa, el maestro Octavio Fernández Barrios le confirmó que esos grabados eran "verdaderas joyas", que se conservan en las bóvedas del Museo bajo clima y luz especiales.

El Museo Nacional de la Acuarela fue creado en los años 80 por el maestro acuarelista mexicano Alfredo Gauti Rojo, el cual se divide en seis salas donde se muestra la historia de esta técnica, desde la época prehispánica hasta la actualidad.

Además es el sitio donde año con año se organiza la Bienal Internacional de Acuarela.

A la inauguración asistieron Teresa Vicencio, directora del Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA), en representación de Consuelo Sáizar, presidenta del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta); el maestro Octavio Fernández Barrios, director del Museo Nacional de la Estampa y la maestra Beatriz Gaminde, directora del Museo Nacional de la Acuarela.
México, D.F.

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