Coinciden en que se trató de un punto clave en la historia pasada y presente de este país
Los expertos Alvaro Matute, Moisés González Navarro y Jean Meyer, participaron la víspera en una mesa redonda sobre la Revolución Mexicana, y aunque ofrecieron distintas posturas coincidieron en que se trató de un punto clave en la historia pasada y presente de este país.Como parte del ciclo de conferencias "Independencia 1810-Revolución 1910. 100 + 100", el debate moderado por Andrés Lira trató de ofrecer a los asistentes una interpretación respecto a tan polémico a este periodo histórico que celebrará en 2010 su centenario.En su participación, el ganador del Premio Fray Bernardino de Sahagún, y profesor emérito de El Colegio de México, Moisés González Navarro, mencionó que esta etapa de la historia nacional se gestó por los factores de desigualdad y pobreza que padecía la mayoría del pueblo.El maestro también mostró un adelanto de su libro que será publicado el próximo año, en el marco de los festejos patrios, y criticó que el nacionalismo que se tenía como país, ahora se refleje en una economía nacional dependiente de Estados Unidos, y que el idioma oficial que invade a la nación sea el "spanglish".En su oportunidad, el historiador mexicano de origen francés, Jean Meyer, recordó que la Revolución es un episodio clave de la historia nacional, y acotó que el término es de origen astronómico y sirve para nombrar el proceso que da un astro y el regreso a su sitio de origen.En este caso, dijo, todos los procesos tienen saldos negativos y éste no fue la excepción. Luego, mencionó varios escenarios que pudieron haber sucedido en caso de que no se consumiera la Revolución mexicana.El historiador leyó un texto enviado por Enrique Krauze, quien se ausentó de la mesa redonda, en el cual se mencionaba que el mexicano cobró conciencia de sí mismo, y se levantó para acabar con malos gobernantes, quienes después volvieron a tomar las riendas del país hasta la fecha, mientras el pueblo duerme nuevamente inconforme.Para finalizar, el historiador Alvaro Matute mencionó que a la gente le da gusto festejar estos acontecimientos, aunque en el fondo no parecen ser lo que realmente fueron, en una reforma violentada contra un capitalismo salvaje, que no logró crear una transformación de las estructuras.Los propios revolucionarios, refirió, llamaban a este movimiento la "bola", que fue creciendo y creciendo hasta que llegó el momento en que se salió de las manos de sus mismos gestores. México, D.F.
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