Está conformada por 10 instalaciones, un “bicivocho” y 56 obras entre dibujo, serigrafía, collages y grabado
Es obra de la artista plástica Helen Escobedo
Un total de 10 instalaciones, un “bicivocho” y 56 obras entre dibujo, serigrafía, collages y grabado integran la exposición “Escuchen el silencio”, de la artista plástica Helen Escobedo, inaugurada la víspera en la Escuela Nacional de Pintura, Escultura y Grabado “La Esmeralda”, del Centro Nacional de las Artes (Cenart).
La muestra de esta creadora que se ha caracterizado por dotar de una vitalidad especial a los materiales que la sociedad desecha, forma parte del homenaje que esta institución le rinde por haber obtenido el Premio Nacional de Ciencias y Artes 2009, en el rubro de Bellas Artes.
En el acto, el director de “La Esmeralda”, Eloy Tarcisio, entregó un diploma a Escobedo por haber sido candidata de la escuela para recibir el citado premio.
Calificó a la homenajeada como una artista que ha tenido una experiencia fuerte en la instalación y diseño de obra para sitios específicos, donde ha cuidado el entorno de la gente que habita en esos lugares.
“Es una artista muy clásica ya dentro del contexto del arte del siglo XXI, para nosotros es un honor tenerla en la escuela y en compartir su experiencia y trabajo con los estudiantes”, dijo.
Para Tarcisio, Escobedo es una de las pioneras del arte producido con elementos de reciclaje en México y una de las figuras más destacadas en la escultura con bronce.
Sobre la muestra, afirmó que se trata de una serie de instalaciones a cerca de la obra que Helen tenía en su bodega, algunas de ellas expuestas no hace poco en el Museo Universitario de Ciencias y Artes (MUCA).
“La idea es poder mostrarlas aquí para que exista una relación con los estudiantes de arte de la escuela. Pues es una artista pionera en las manifestaciones contemporáneas, fue ella quien planteó el inicio de estas corrientes en México”, expresó.
De igual manera, la nombró como una clásica creadora del siglo XXI que emergió del siglo XX para mostrar rutas que permiten que el joven emprenda su propio camino, viendo que éste ya está trazado para ser continuado a través de nuevos destinos desconocidos.
“Ver, transitar, dejarse envolver, reflexionar en el espacio construido por Helen es la condición para sumergirse en sus propuestas estéticas”, expresó.
Por su parte, Carlos Aranda Márquez, curador de la exhibición, dijo que cada una de las instalaciones que Escobedo ha trabajado, parten de algunos elementos centrales: las observaciones que ella emprende del entorno, la utilización de los recursos disponibles a la mano y la traducción poética en que terminan cada una de las obras.
En cada una de ellas, agregó, se ofrece una pregunta que permite orientar la percepción del espectador.
“Para Helen, el arte es una fuente de vida, de sabiduría, de emociones, de un universo de posibilidades. Frente a la ignorancia, la crueldad y la incomprensión, nos propone modelos para construir un significado del mundo”, destacó.
La muestra que estará hasta el 28 de mayo, da la bienvenida a las visitantes con un “bicivocho”, un guiño sarcástico hacia los “bicitaxis”, uno de los clásicos medios de transporte que se pueden encontrar en el centro de la ciudad.
Al igual que los “bicitaxis”, el vehículo de Escobedo también es apto para circular distancias cortas con un máximo de tres pasajeros.
La exposición continúa con una serie de instalación en donde la artista deja entrever su imaginación y capacidad creadora, y enseguida se presentan diversos trabajos como dibujos, serigrafías, collages y grabados.
México, D.F.
Es obra de la artista plástica Helen Escobedo
Un total de 10 instalaciones, un “bicivocho” y 56 obras entre dibujo, serigrafía, collages y grabado integran la exposición “Escuchen el silencio”, de la artista plástica Helen Escobedo, inaugurada la víspera en la Escuela Nacional de Pintura, Escultura y Grabado “La Esmeralda”, del Centro Nacional de las Artes (Cenart).
La muestra de esta creadora que se ha caracterizado por dotar de una vitalidad especial a los materiales que la sociedad desecha, forma parte del homenaje que esta institución le rinde por haber obtenido el Premio Nacional de Ciencias y Artes 2009, en el rubro de Bellas Artes.
En el acto, el director de “La Esmeralda”, Eloy Tarcisio, entregó un diploma a Escobedo por haber sido candidata de la escuela para recibir el citado premio.
Calificó a la homenajeada como una artista que ha tenido una experiencia fuerte en la instalación y diseño de obra para sitios específicos, donde ha cuidado el entorno de la gente que habita en esos lugares.
“Es una artista muy clásica ya dentro del contexto del arte del siglo XXI, para nosotros es un honor tenerla en la escuela y en compartir su experiencia y trabajo con los estudiantes”, dijo.
Para Tarcisio, Escobedo es una de las pioneras del arte producido con elementos de reciclaje en México y una de las figuras más destacadas en la escultura con bronce.
Sobre la muestra, afirmó que se trata de una serie de instalaciones a cerca de la obra que Helen tenía en su bodega, algunas de ellas expuestas no hace poco en el Museo Universitario de Ciencias y Artes (MUCA).
“La idea es poder mostrarlas aquí para que exista una relación con los estudiantes de arte de la escuela. Pues es una artista pionera en las manifestaciones contemporáneas, fue ella quien planteó el inicio de estas corrientes en México”, expresó.
De igual manera, la nombró como una clásica creadora del siglo XXI que emergió del siglo XX para mostrar rutas que permiten que el joven emprenda su propio camino, viendo que éste ya está trazado para ser continuado a través de nuevos destinos desconocidos.
“Ver, transitar, dejarse envolver, reflexionar en el espacio construido por Helen es la condición para sumergirse en sus propuestas estéticas”, expresó.
Por su parte, Carlos Aranda Márquez, curador de la exhibición, dijo que cada una de las instalaciones que Escobedo ha trabajado, parten de algunos elementos centrales: las observaciones que ella emprende del entorno, la utilización de los recursos disponibles a la mano y la traducción poética en que terminan cada una de las obras.
En cada una de ellas, agregó, se ofrece una pregunta que permite orientar la percepción del espectador.
“Para Helen, el arte es una fuente de vida, de sabiduría, de emociones, de un universo de posibilidades. Frente a la ignorancia, la crueldad y la incomprensión, nos propone modelos para construir un significado del mundo”, destacó.
La muestra que estará hasta el 28 de mayo, da la bienvenida a las visitantes con un “bicivocho”, un guiño sarcástico hacia los “bicitaxis”, uno de los clásicos medios de transporte que se pueden encontrar en el centro de la ciudad.
Al igual que los “bicitaxis”, el vehículo de Escobedo también es apto para circular distancias cortas con un máximo de tres pasajeros.
La exposición continúa con una serie de instalación en donde la artista deja entrever su imaginación y capacidad creadora, y enseguida se presentan diversos trabajos como dibujos, serigrafías, collages y grabados.
México, D.F.
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