La agrupación fue la encargada de cerrar la Temporada Primavera 2010 de Parnassós.
La escuela rusa de ballet sigue dando cátedra de ser una de las mejores del mundo.
La noche de ayer se presentó el Ballet Mari El en el auditorio San Pedro, ofreciendo una velada llena de técnica para así cerrar la Temporada Primavera 2010 del festival cultural Parnassós.
A pesar de contar con una austera producción, dado que el montaje incluyó poco juego de luces y una escenografía basada en un solo telón, cada uno de los bailarines destacaron por su técnica y coordinación, tendiendo algunos casos en donde un bailarín interpretó tanto coreografías de ballet clásico como piezas contemporáneas.
Ante una sala casi llena, el Ballet Mari El destacó principalmente en el pas de deux del ballet El Quijote, con los bailarines protagónicos Olga Chelpanova y Constantin Korotkov. En esta pieza, resultó admirable la participación de Olga en sus dos actos solistas. La misma pareja sorprendió con su coordinación y técnica mostrada en la pieza Invierno.
La segunda parte del espectáculo fue completamente dedicada a la obra Camina Burana, pieza por demás reconocida del compositor alemán Carl Orf.
El público respondió con aplausos y con los ¡bravos! de la noche para piezas como La primavera o La taberna, esta última desatando la risa en un sector de los asistentes.
La culminación se dio con el acto “Fortuna emperatriz del mundo”, una de las piezas más emblemáticas del Carmina Burana, en donde se ofreció una buena coordinación de todos los bailarines, lo cual provocó los aplausos del público.
El ballet Mari El, de Rusia, es una compañía que cuenta con 45 años de experiencia y la mayoría de sus bailarines actuales son jóvenes. La compañía ha sido condecorada con el primer premio de la República que otorga Rusia a las Artes.
Monterrey, NL
La escuela rusa de ballet sigue dando cátedra de ser una de las mejores del mundo.
La noche de ayer se presentó el Ballet Mari El en el auditorio San Pedro, ofreciendo una velada llena de técnica para así cerrar la Temporada Primavera 2010 del festival cultural Parnassós.
A pesar de contar con una austera producción, dado que el montaje incluyó poco juego de luces y una escenografía basada en un solo telón, cada uno de los bailarines destacaron por su técnica y coordinación, tendiendo algunos casos en donde un bailarín interpretó tanto coreografías de ballet clásico como piezas contemporáneas.
Ante una sala casi llena, el Ballet Mari El destacó principalmente en el pas de deux del ballet El Quijote, con los bailarines protagónicos Olga Chelpanova y Constantin Korotkov. En esta pieza, resultó admirable la participación de Olga en sus dos actos solistas. La misma pareja sorprendió con su coordinación y técnica mostrada en la pieza Invierno.
La segunda parte del espectáculo fue completamente dedicada a la obra Camina Burana, pieza por demás reconocida del compositor alemán Carl Orf.
El público respondió con aplausos y con los ¡bravos! de la noche para piezas como La primavera o La taberna, esta última desatando la risa en un sector de los asistentes.
La culminación se dio con el acto “Fortuna emperatriz del mundo”, una de las piezas más emblemáticas del Carmina Burana, en donde se ofreció una buena coordinación de todos los bailarines, lo cual provocó los aplausos del público.
El ballet Mari El, de Rusia, es una compañía que cuenta con 45 años de experiencia y la mayoría de sus bailarines actuales son jóvenes. La compañía ha sido condecorada con el primer premio de la República que otorga Rusia a las Artes.
Monterrey, NL
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