La exposición Memorias de China engloba 20 visiones de ese país, por un lado, la de los artista españoles que han llegado al país con sus propias ideas preconcebidas y la de los chinos autóctonos
Diez artistas españoles y diez chinos exhiben estos días en Beijing algunas de sus obras en la exposición "Memorias de China", que tiene como objetivo compartir y mostrar nuevas visiones sobre la realidad del gigante asiático.
"Se trata de un intercambio cultural entre artistas chinos y españoles", explica Judas Arrieta, artista guipuzcoano, de 38 años y afincado en la capital china desde hace cuatro.
Durante dos meses, periodo que dura la residencia de los artistas españoles, éstos tienen la oportunidad de desarrollar sus obras en el MA Studio de Beijing, del que Arrieta es director, y posteriormente exponerlas en diferentes galerías de la capital china.
Según este guipuzcoano, fundador de los programas de residencia, este año se sienten especialmente orgullosos del resultado, ya que sus obras están expuestas en la famosa galería 798, abierta a finales de los años 80, y que da nombre a uno de los barrios artísticos más célebres de todo Beijing.
"Este lugar es una referencia y exponer aquí es el sueño de cualquier artista", asegura Arrieta.
"Memorias de China" engloba 20 visiones de China dividas en dos partes. Por un lado, la de los artista españoles que han llegado al país con sus propias ideas preconcebidas y por otro, la de los chinos autóctonos.
"En este momento Pekín es el París de principios del siglo XX en Europa y la exposición es un homenaje a todo lo que está pasando aquí", señala.
Para Arrieta, que dice haberse criado con películas de kung fu, el vivir en China le permite empaparse de esta cultura con la que ha crecido y mostrar a los chinos el amor por su país y enseñarles como "hacer arte a su manera", ya que según él son pocos los artistas chinos que han tenido la oportunidad de salir al extranjero.
Y así en "Memorias de China" los artistas españoles de visita en Beijing y los chinos que viven en el gigante asiático reflexionan en sus trabajos sobre la transformación cultural en varios contextos de la realidad.
"Es una gran oportunidad para conocer el gran potencial que tiene China y exponer en una galería de este tipo es una experiencia que en España no podrías ni siquiera imaginar", dice el pintor logroñés Carlos Corres cuya obras expuestas fusionan la figuración con elementos tradicionales chinos.
Su colega Carlos Garrido, también de Logroño, afirma que el estar en Beijing "te da una visión diferente del concepto de arte chino que tenía antes de llegar" ya que "la realidad china está un poco distorsionada".
"Aquí tienes tiempo de conocer a los artistas y su modo de vida", comenta Garrido, quien subraya que los creadores chinos además de ser unos profesionales extraordinarios les han abierto las puertas y dejado conocer su propio mundo.
El público podrá disfrutar de la exposición "Memorias de China" hasta el próximo 18 octubre en la galería 798 de Beijing. Beijin, China
"Se trata de un intercambio cultural entre artistas chinos y españoles", explica Judas Arrieta, artista guipuzcoano, de 38 años y afincado en la capital china desde hace cuatro.
Durante dos meses, periodo que dura la residencia de los artistas españoles, éstos tienen la oportunidad de desarrollar sus obras en el MA Studio de Beijing, del que Arrieta es director, y posteriormente exponerlas en diferentes galerías de la capital china.
Según este guipuzcoano, fundador de los programas de residencia, este año se sienten especialmente orgullosos del resultado, ya que sus obras están expuestas en la famosa galería 798, abierta a finales de los años 80, y que da nombre a uno de los barrios artísticos más célebres de todo Beijing.
"Este lugar es una referencia y exponer aquí es el sueño de cualquier artista", asegura Arrieta.
"Memorias de China" engloba 20 visiones de China dividas en dos partes. Por un lado, la de los artista españoles que han llegado al país con sus propias ideas preconcebidas y por otro, la de los chinos autóctonos.
"En este momento Pekín es el París de principios del siglo XX en Europa y la exposición es un homenaje a todo lo que está pasando aquí", señala.
Para Arrieta, que dice haberse criado con películas de kung fu, el vivir en China le permite empaparse de esta cultura con la que ha crecido y mostrar a los chinos el amor por su país y enseñarles como "hacer arte a su manera", ya que según él son pocos los artistas chinos que han tenido la oportunidad de salir al extranjero.
Y así en "Memorias de China" los artistas españoles de visita en Beijing y los chinos que viven en el gigante asiático reflexionan en sus trabajos sobre la transformación cultural en varios contextos de la realidad.
"Es una gran oportunidad para conocer el gran potencial que tiene China y exponer en una galería de este tipo es una experiencia que en España no podrías ni siquiera imaginar", dice el pintor logroñés Carlos Corres cuya obras expuestas fusionan la figuración con elementos tradicionales chinos.
Su colega Carlos Garrido, también de Logroño, afirma que el estar en Beijing "te da una visión diferente del concepto de arte chino que tenía antes de llegar" ya que "la realidad china está un poco distorsionada".
"Aquí tienes tiempo de conocer a los artistas y su modo de vida", comenta Garrido, quien subraya que los creadores chinos además de ser unos profesionales extraordinarios les han abierto las puertas y dejado conocer su propio mundo.
El público podrá disfrutar de la exposición "Memorias de China" hasta el próximo 18 octubre en la galería 798 de Beijing. Beijin, China
No hay comentarios:
Publicar un comentario