Adriana Marrufo desarrolla el proyecto de gráfica 'Papaloteando', con el apoyo de Conaculta, a través del Programa Jóvenes Creadores, del Fondo Nacional para la Cultura y las Artes
Adriana Marrufo aún recuerda cuando de niña solía fabricar papalotes junto con sus amigos, y la emoción que sentía al verlos surcar los aires con movimientos parecidos a los de una mariposa o una hoja de árbol que planea sostenida por el viento.
'Desde entonces asocié a los papalotes con la metáfora del vuelo, ése que imaginamos cuando soñamos o cuando observamos a las aves o a las mariposas sostenerse en el aire. En cierta manera la naturaleza del hombre ha estado siempre vinculada al deseo de volar'.
Convencida de que el papalote, además de ser un objeto lúdico cumple una función metafórica de esos deseos por conquistar los aires y por conocer la experiencia del vuelo, Marrufo desarrolla el proyecto de gráfica 'Papaloteando', con el apoyo de Conaculta, a través del Programa Jóvenes Creadores, del Fondo Nacional para la Cultura y las Artes.
'Se trata de una serie de piezas con forma de papalote que están realizadas con papel elaborado con la mezcla de diversos tipos de material. Creo que los soportes para la obra gráfica pueden ser muy diversos y por ello hay que hacer uso de la creatividad para encontrar otras texturas en las cuales plasmar la obra'.
Para sus papalotes, dijo, ha recolectado diversos tipos de hojas de árboles, así como pétalos de diversas flores, con los que ha creado soportes para plasmas por medio de placas una serie de iconografías prehispánicas relacionadas con las mariposas.
'Las culturas ancestrales de México tenían un gran respeto por la belleza de la mariposa y la manera como parecía fundirse con las flores. Por ello, para este trabajo las imágenes están plasmadas sobre materiales naturales vinculados al entorno de estas criaturas.
En cierta manera hay también un mensaje ecológico en cada pieza relacionado con la cultura del reciclaje'.
Graduada de la carrera de Arte de la Universidad Autónoma de Hidalgo, Adriana Marrufo confesó que el inicio de este proyecto ha representado también para ella un cambio de vida.
'Quería conocer uno de los centros más importantes del mundo prehispánico que era Tenochtitlan y por ello decidí mudarme a la ciudad de México, para así poder conocer más acerca de la iconografía que plasmaron los aztecas en diversas representaciones'.
Marrufo refirió que para la recolección de hojas y otros materiales naturales acude con frecuencia a un paraje que está por el rumbo de Taxqueña, además del bosque de Chapultepec, donde hay desde ramas de diversas variedades hasta flores, raíces y hojas.
'Creo que el proceso de armado de cada papalote artístico es también muy interesante. En realidad hay una idea inicial al construirlos que luego va cobrando forma con cada elemento natural que voy encontrando. Comencé con una serie de 12 piezas y a la fecha estoy por culminar la otra mitad'.
La artista expresó que su participación en los encuentros del Programa Jóvenes Creadores y el intercambio de experiencias con los tutores y otros becarios ha sido muy importante para redondear diversos conceptos estéticos de este proyecto.
'Existe una gran retroalimentación en este tipo de reuniones con otros artistas y con maestros que tienen una gran experiencia en la gráfica. Hay muchos elementos que he afinado gracias a las tutorías y de ahí la importancia de este programa que no sólo otorga un apoyo económico, sino la oportunidad de entrar en contacto con creadores de diversas generaciones'.
Adriana Marrufo explicó que el proyecto 'Papaloteando' culminará con la creación de un audiovisual donde se mostrará el registro de creación de cada pieza y los diversos materiales que se recolectaron.
'El movimiento de la gráfica tiene una gran tradición en nuestro país y por ello es vital que las nuevas generaciones de artistas continúen preservándolo. La gráfica es parte de nuestra memoria e identidad y narra a través de las imágenes todo aquello que somos como mexicanos', concluyó Marrufo.
Ciudad de México
Adriana Marrufo aún recuerda cuando de niña solía fabricar papalotes junto con sus amigos, y la emoción que sentía al verlos surcar los aires con movimientos parecidos a los de una mariposa o una hoja de árbol que planea sostenida por el viento.
'Desde entonces asocié a los papalotes con la metáfora del vuelo, ése que imaginamos cuando soñamos o cuando observamos a las aves o a las mariposas sostenerse en el aire. En cierta manera la naturaleza del hombre ha estado siempre vinculada al deseo de volar'.
Convencida de que el papalote, además de ser un objeto lúdico cumple una función metafórica de esos deseos por conquistar los aires y por conocer la experiencia del vuelo, Marrufo desarrolla el proyecto de gráfica 'Papaloteando', con el apoyo de Conaculta, a través del Programa Jóvenes Creadores, del Fondo Nacional para la Cultura y las Artes.
'Se trata de una serie de piezas con forma de papalote que están realizadas con papel elaborado con la mezcla de diversos tipos de material. Creo que los soportes para la obra gráfica pueden ser muy diversos y por ello hay que hacer uso de la creatividad para encontrar otras texturas en las cuales plasmar la obra'.
Para sus papalotes, dijo, ha recolectado diversos tipos de hojas de árboles, así como pétalos de diversas flores, con los que ha creado soportes para plasmas por medio de placas una serie de iconografías prehispánicas relacionadas con las mariposas.
'Las culturas ancestrales de México tenían un gran respeto por la belleza de la mariposa y la manera como parecía fundirse con las flores. Por ello, para este trabajo las imágenes están plasmadas sobre materiales naturales vinculados al entorno de estas criaturas.
En cierta manera hay también un mensaje ecológico en cada pieza relacionado con la cultura del reciclaje'.
Graduada de la carrera de Arte de la Universidad Autónoma de Hidalgo, Adriana Marrufo confesó que el inicio de este proyecto ha representado también para ella un cambio de vida.
'Quería conocer uno de los centros más importantes del mundo prehispánico que era Tenochtitlan y por ello decidí mudarme a la ciudad de México, para así poder conocer más acerca de la iconografía que plasmaron los aztecas en diversas representaciones'.
Marrufo refirió que para la recolección de hojas y otros materiales naturales acude con frecuencia a un paraje que está por el rumbo de Taxqueña, además del bosque de Chapultepec, donde hay desde ramas de diversas variedades hasta flores, raíces y hojas.
'Creo que el proceso de armado de cada papalote artístico es también muy interesante. En realidad hay una idea inicial al construirlos que luego va cobrando forma con cada elemento natural que voy encontrando. Comencé con una serie de 12 piezas y a la fecha estoy por culminar la otra mitad'.
La artista expresó que su participación en los encuentros del Programa Jóvenes Creadores y el intercambio de experiencias con los tutores y otros becarios ha sido muy importante para redondear diversos conceptos estéticos de este proyecto.
'Existe una gran retroalimentación en este tipo de reuniones con otros artistas y con maestros que tienen una gran experiencia en la gráfica. Hay muchos elementos que he afinado gracias a las tutorías y de ahí la importancia de este programa que no sólo otorga un apoyo económico, sino la oportunidad de entrar en contacto con creadores de diversas generaciones'.
Adriana Marrufo explicó que el proyecto 'Papaloteando' culminará con la creación de un audiovisual donde se mostrará el registro de creación de cada pieza y los diversos materiales que se recolectaron.
'El movimiento de la gráfica tiene una gran tradición en nuestro país y por ello es vital que las nuevas generaciones de artistas continúen preservándolo. La gráfica es parte de nuestra memoria e identidad y narra a través de las imágenes todo aquello que somos como mexicanos', concluyó Marrufo.
Ciudad de México
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