El Instituto dio a conocer que el ejército de España tomó tal decisión como una medida de ataque en contra de Morelos, considerado como uno de los caudillos más importantes de la guerra de independencia.
La casa del prócer de la independencia de México, José María Morelos y Pavón, una vivienda típica del siglo XVIII, que fue desvastada por los altos mandos del ejército español, fue restaurada por el Instituto Nacional de Antropología e Historia, con el fin de engrandecer el pasado que transitó por esos espacios.
El INAH asimismo dio a conocer que el ejército de España tomó tal decisión como una medida de ataque en contra de Morelos, considerado como uno de los caudillos más importantes de la guerra de independencia.
Agregó que era una típica vivienda de la otrora Valladolid, hoy Morelia, que Morelos adquirió y cuidó hasta su captura y que pasada la guerra, la casa fue devuelta a la familia y reconstruída.
Señaló que muchos años después el gobierno federal la adquirió para albergar un museo en honor del prócer de la patria.
Después de 30 años de no recibir intervenciones como recinto cultural, y con motivo del Bicentenario de la Independencia, la casa de Morelos fue restaurada.
El director del hoy Museo Casa de Morelos, historiador Jaime Reyes Monroy, explicó que los trabajos para poner en valor la propiedad que adquirió Morelos y la cual cuidó hasta su captura por el ejército realista, requirieron de ocho meses, priorizando el rescate de las características arquitectónicas originales; en forma paralela se cambiaron los sistemas de funcionamiento del edificio, y finalmente se realizó el nuevo montaje museográfico.
Señaló que fue sustituida toda la viguería de madera de los techos, se recuperaron puertas y ventanas, se restituyeron los pisos de ladrillo, se hizo limpieza y restitución de los elementos de herrería, y de la cantera de las columnas y muros.
La antigua morada, caracterizada por su sobriedad, propia de una familia no prominente, está ubicada en lo que durante la Colonia (1521-1821) fue un barrio humilde de las afueras de Valladolid (Morelia) y que hoy forma parte del Centro Histórico de la capital.
El Museo Casa de Morelos fue reabierto al público este diciembre, luego de una renovación de su discurso museográfico y su reestructuración arquitectónica.
En lo que se refiere a la museografía, Reyes Monroy explicó que el recorrido fue ampliado de cuatro a ocho salas, con nuevas piezas que provienen, además de los acervos de la propia Casa de Morelos, de los museos Nacionales de Historia y del Virreinato; los regionales de Guadalajara, Michoacano y Querétaro, además de los recintos de El Carmen e Histórico del Oriente de Morelos.
El guión temático, la propuesta museográfica y la curaduría fueron concebidos por la Coordinación Nacional de Museos y Exposiciones, a partir de recientes investigaciones historiográficas que modificaron la visión de José María Morelos, de la guerra y del proceso de Independencia, realizadas por historiadores del INAH, el Colegio de Michoacán y la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo.
Entre los objetos en exhibición se encuentran óleos de personajes importantes y facsimilares de documentos históricos, como los Sentimientos de la Nación; mobiliario y objetos de uso cotidiano de la época, armas, réplicas de las banderas de los insurgentes.
Cerámica propia de la transportada por el comercio colonial a través de los galeones, y tres piezas atribuidas a Morelos: su mascarilla fúnebre, una casaca militar y un fragmento del pañuelo con el que se dice, cubrieron los ojos del caudillo durante su fusilamiento.
La Sala I muestra una síntesis histórica de la fundación del Obispado de Michoacán, personajes clave como Vasco de Quiroga y Pedro Anselmo Sánchez de Tagle, además del desarrollo de Valladolid, una de las ciudades más importantes del Virreinato.
La Sala II se refiere a la casa adquirida por Morelos y habitada por su familia, a través de aspectos de la construcción del inmueble y el uso del espacio en distintas épocas.
La Sala III presenta los rasgos biográficos del caudillo, mediante el análisis de su dimensión humana e intelectual. La Sala IV ofrece el contexto histórico de la guerra de Independencia, y brinda los elementos para comprender las razones de la vinculación y participación activa de José María Morelos y Pavón en el movimiento.
De igual forma, aborda el siglo XVIII con énfasis en las Reformas Borbónicas y sus efectos en el Virreinato, así como el pensamiento ilustrado del Obispado de Michoacán.
Las reformas parroquiales de fray Antonio de San Miguel, y el papel fundamental de los centros de enseñanza -como el Seminario Tridentino y el Colegio de San Nicolás- en la formación de la "generación de la Independencia".
En la Sala V se detallan los antecedentes de la insurrección en el Obispado de Michoacán, la crisis política de la monarquía española a finales del siglo XVIII, la junta de Valladolid y la conspiración de 1809, las razones del clero para unirse a la causa insurgente y la primera etapa de la Guerra de Independencia, así como la llamada "entrevista Charo-Indaparapeo", en la que don Miguel Hidalgo comisiona a Morelos a insurreccionar el sur.
En las salas VI y VII el guión presenta el periodo comprendido entre 1810 y 1815, lustro en el que se desarrollan las cinco campañas militares de Morelos y sus acciones políticas más contundentes.
El sitio de Cuautla, la toma de Oaxaca, el sitio de Acapulco y otras acciones militares. Así como el establecimiento de la Suprema Junta Nacional de Zitácuaro y el Congreso de Chilpancingo.
También se destaca el legado político e intelectual del Caudillo del Sur: la supresión de las castas expresada en el Bando del Aguacatillo, la redacción de los Sentimientos de la Nación y la Constitución de Apatzingán. Además de otros documentos y pronunciamientos que constituyen los fundamentos de la nación libre y soberana.
Finalmente, la Sala VIII aborda la aprehensión de Morelos; su traslado a la Ciudad de México y su proceso inquisitorial, para concluir con su fusilamiento en San Cristóbal Ecatepec, Estado de México, el 22 de diciembre de 1815.
La renovación del Museo Casa de Morelos incluye apoyos museográficos, como una iluminación dirigida que resalta las piezas, y se implementaron cedularios electrónicos que junto con los temáticos (en español e inglés) ilustran aspectos y momentos significativos del movimiento independentista.
Así como de la participación de Morelos y una campana de sonido con la narración de los Sentimientos de la Nación. Además se montaron ambientaciones de espacios que evocan las actividades del caudillo.
Morelia, Mich.
La casa del prócer de la independencia de México, José María Morelos y Pavón, una vivienda típica del siglo XVIII, que fue desvastada por los altos mandos del ejército español, fue restaurada por el Instituto Nacional de Antropología e Historia, con el fin de engrandecer el pasado que transitó por esos espacios.
El INAH asimismo dio a conocer que el ejército de España tomó tal decisión como una medida de ataque en contra de Morelos, considerado como uno de los caudillos más importantes de la guerra de independencia.
Agregó que era una típica vivienda de la otrora Valladolid, hoy Morelia, que Morelos adquirió y cuidó hasta su captura y que pasada la guerra, la casa fue devuelta a la familia y reconstruída.
Señaló que muchos años después el gobierno federal la adquirió para albergar un museo en honor del prócer de la patria.
Después de 30 años de no recibir intervenciones como recinto cultural, y con motivo del Bicentenario de la Independencia, la casa de Morelos fue restaurada.
El director del hoy Museo Casa de Morelos, historiador Jaime Reyes Monroy, explicó que los trabajos para poner en valor la propiedad que adquirió Morelos y la cual cuidó hasta su captura por el ejército realista, requirieron de ocho meses, priorizando el rescate de las características arquitectónicas originales; en forma paralela se cambiaron los sistemas de funcionamiento del edificio, y finalmente se realizó el nuevo montaje museográfico.
Señaló que fue sustituida toda la viguería de madera de los techos, se recuperaron puertas y ventanas, se restituyeron los pisos de ladrillo, se hizo limpieza y restitución de los elementos de herrería, y de la cantera de las columnas y muros.
La antigua morada, caracterizada por su sobriedad, propia de una familia no prominente, está ubicada en lo que durante la Colonia (1521-1821) fue un barrio humilde de las afueras de Valladolid (Morelia) y que hoy forma parte del Centro Histórico de la capital.
El Museo Casa de Morelos fue reabierto al público este diciembre, luego de una renovación de su discurso museográfico y su reestructuración arquitectónica.
En lo que se refiere a la museografía, Reyes Monroy explicó que el recorrido fue ampliado de cuatro a ocho salas, con nuevas piezas que provienen, además de los acervos de la propia Casa de Morelos, de los museos Nacionales de Historia y del Virreinato; los regionales de Guadalajara, Michoacano y Querétaro, además de los recintos de El Carmen e Histórico del Oriente de Morelos.
El guión temático, la propuesta museográfica y la curaduría fueron concebidos por la Coordinación Nacional de Museos y Exposiciones, a partir de recientes investigaciones historiográficas que modificaron la visión de José María Morelos, de la guerra y del proceso de Independencia, realizadas por historiadores del INAH, el Colegio de Michoacán y la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo.
Entre los objetos en exhibición se encuentran óleos de personajes importantes y facsimilares de documentos históricos, como los Sentimientos de la Nación; mobiliario y objetos de uso cotidiano de la época, armas, réplicas de las banderas de los insurgentes.
Cerámica propia de la transportada por el comercio colonial a través de los galeones, y tres piezas atribuidas a Morelos: su mascarilla fúnebre, una casaca militar y un fragmento del pañuelo con el que se dice, cubrieron los ojos del caudillo durante su fusilamiento.
La Sala I muestra una síntesis histórica de la fundación del Obispado de Michoacán, personajes clave como Vasco de Quiroga y Pedro Anselmo Sánchez de Tagle, además del desarrollo de Valladolid, una de las ciudades más importantes del Virreinato.
La Sala II se refiere a la casa adquirida por Morelos y habitada por su familia, a través de aspectos de la construcción del inmueble y el uso del espacio en distintas épocas.
La Sala III presenta los rasgos biográficos del caudillo, mediante el análisis de su dimensión humana e intelectual. La Sala IV ofrece el contexto histórico de la guerra de Independencia, y brinda los elementos para comprender las razones de la vinculación y participación activa de José María Morelos y Pavón en el movimiento.
De igual forma, aborda el siglo XVIII con énfasis en las Reformas Borbónicas y sus efectos en el Virreinato, así como el pensamiento ilustrado del Obispado de Michoacán.
Las reformas parroquiales de fray Antonio de San Miguel, y el papel fundamental de los centros de enseñanza -como el Seminario Tridentino y el Colegio de San Nicolás- en la formación de la "generación de la Independencia".
En la Sala V se detallan los antecedentes de la insurrección en el Obispado de Michoacán, la crisis política de la monarquía española a finales del siglo XVIII, la junta de Valladolid y la conspiración de 1809, las razones del clero para unirse a la causa insurgente y la primera etapa de la Guerra de Independencia, así como la llamada "entrevista Charo-Indaparapeo", en la que don Miguel Hidalgo comisiona a Morelos a insurreccionar el sur.
En las salas VI y VII el guión presenta el periodo comprendido entre 1810 y 1815, lustro en el que se desarrollan las cinco campañas militares de Morelos y sus acciones políticas más contundentes.
El sitio de Cuautla, la toma de Oaxaca, el sitio de Acapulco y otras acciones militares. Así como el establecimiento de la Suprema Junta Nacional de Zitácuaro y el Congreso de Chilpancingo.
También se destaca el legado político e intelectual del Caudillo del Sur: la supresión de las castas expresada en el Bando del Aguacatillo, la redacción de los Sentimientos de la Nación y la Constitución de Apatzingán. Además de otros documentos y pronunciamientos que constituyen los fundamentos de la nación libre y soberana.
Finalmente, la Sala VIII aborda la aprehensión de Morelos; su traslado a la Ciudad de México y su proceso inquisitorial, para concluir con su fusilamiento en San Cristóbal Ecatepec, Estado de México, el 22 de diciembre de 1815.
La renovación del Museo Casa de Morelos incluye apoyos museográficos, como una iluminación dirigida que resalta las piezas, y se implementaron cedularios electrónicos que junto con los temáticos (en español e inglés) ilustran aspectos y momentos significativos del movimiento independentista.
Así como de la participación de Morelos y una campana de sonido con la narración de los Sentimientos de la Nación. Además se montaron ambientaciones de espacios que evocan las actividades del caudillo.
Morelia, Mich.
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