Alejandra Moreno Toscano, autoridad del Centro Histórico, dijo que el Centro de Información dará servicios acerca de toda la ciudad
Con una inversión de 30 millones de pesos, la restauración del edificio Rule inicipo ayer. Ubicado en Eje Central número 6, a un lado de la Torre Latinoamericana, este inmueble albergará, tras las obras de rescate, un Centro de Información Turística del Centro Histórico y la Casa de Cultura de Colombia.
El proyecto, pospuesto desde hace más de siete años, será financiado por partes iguales por World Monuments Fund, la Fundación del Centro Histórico de la Ciudad de México, A.C., y el Fideicomiso del Centro Histórico del GDF.
La restauración del edificio, catalogado como obra de valor artístico y monumento histórico en el área de la antigua capilla, se tomará un año aproximadamente, dijo Adrián Pandal, director ejecutivo de la Fundación del Centro Histórico.
El proyecto cuenta con asesoría de los institutos Nacional de Antropología e Historia y Nacional de Bellas Artes. Los trabajos implican la restauración de la construcción y una propuesta integral de rehabilitación, limpieza, consolidación, conservación y puesta en valor del recinto.
Con una fachada que data de comienzos del siglo XX, el edificio Rule ocupó parte del Convento de San Francisco; en él se hallaba la capilla del Santo Cristo de Burgos, erigida en 1780 aproximadamente; una parte de esos vestigios aún se puede ver en los muros interiores del Rule, que dan al atrio de San Francisco.
A finales del siglo XIX el edificio fue sede del Hotel Lara; en los años 30 se modificó el inmueble para albergar la sala Cinelandia que fue visitada por muchos capitalinos durante varias décadas. Pero los sismos de 1985 afectaron considerablemente la estructura del inmueble.
Pandal dijo que el edificio proyectado contará con cinco plantas. Explicó que American Express dio un donativo para el Centro de Información Turística por 200 mil dólares. En el caso de la Casa de Colombia, dijo que el gobierno de ese país “está puestísimo” y que habrá que aterrizar las ideas que tienen las autoridades colombianas al respecto; precisó que ese centro cultural sería administrado por dicha nación.
El proyecto tentativo es que en la planta baja haya una serie de locales comerciales, como un café o un restaurante; en los siguientes niveles el Centro de Información Turística; posteriormente la Casa de Colombia y en la terraza se abrirá otra cafetería, con vista a varios espacios del centro. El mantenimiento del inmueble, se espera, será posible con la renta de los espacios comerciales.
Alejandra Moreno Toscano, autoridad del Centro Histórico, dijo que el Centro de Información dará servicios no sólo acerca del primer cuadro de la capital del país, sino también de toda la ciudad.
El arquitecto Ramón Bonfil explicó que actualmente el edificio presenta los riesgos de un edificio abandonado, con una estructura ya obsoleta, pero sin riesgos de que se caiga. “Tiene que consolidarse para amarrarlo en primer lugar, antes de empezar la construcción de lo que es nuevo. Se va a aprovechar, hasta donde sea posible, todo el material y la estructura existente. La fachada es lo primero que se va a fijar, habrá que cambiar elementos, pero en lo posible se conservarán todos los elementos originales”.
Con una inversión de 30 millones de pesos, la restauración del edificio Rule inicipo ayer. Ubicado en Eje Central número 6, a un lado de la Torre Latinoamericana, este inmueble albergará, tras las obras de rescate, un Centro de Información Turística del Centro Histórico y la Casa de Cultura de Colombia.
El proyecto, pospuesto desde hace más de siete años, será financiado por partes iguales por World Monuments Fund, la Fundación del Centro Histórico de la Ciudad de México, A.C., y el Fideicomiso del Centro Histórico del GDF.
La restauración del edificio, catalogado como obra de valor artístico y monumento histórico en el área de la antigua capilla, se tomará un año aproximadamente, dijo Adrián Pandal, director ejecutivo de la Fundación del Centro Histórico.
El proyecto cuenta con asesoría de los institutos Nacional de Antropología e Historia y Nacional de Bellas Artes. Los trabajos implican la restauración de la construcción y una propuesta integral de rehabilitación, limpieza, consolidación, conservación y puesta en valor del recinto.
Con una fachada que data de comienzos del siglo XX, el edificio Rule ocupó parte del Convento de San Francisco; en él se hallaba la capilla del Santo Cristo de Burgos, erigida en 1780 aproximadamente; una parte de esos vestigios aún se puede ver en los muros interiores del Rule, que dan al atrio de San Francisco.
A finales del siglo XIX el edificio fue sede del Hotel Lara; en los años 30 se modificó el inmueble para albergar la sala Cinelandia que fue visitada por muchos capitalinos durante varias décadas. Pero los sismos de 1985 afectaron considerablemente la estructura del inmueble.
Pandal dijo que el edificio proyectado contará con cinco plantas. Explicó que American Express dio un donativo para el Centro de Información Turística por 200 mil dólares. En el caso de la Casa de Colombia, dijo que el gobierno de ese país “está puestísimo” y que habrá que aterrizar las ideas que tienen las autoridades colombianas al respecto; precisó que ese centro cultural sería administrado por dicha nación.
El proyecto tentativo es que en la planta baja haya una serie de locales comerciales, como un café o un restaurante; en los siguientes niveles el Centro de Información Turística; posteriormente la Casa de Colombia y en la terraza se abrirá otra cafetería, con vista a varios espacios del centro. El mantenimiento del inmueble, se espera, será posible con la renta de los espacios comerciales.
Alejandra Moreno Toscano, autoridad del Centro Histórico, dijo que el Centro de Información dará servicios no sólo acerca del primer cuadro de la capital del país, sino también de toda la ciudad.
El arquitecto Ramón Bonfil explicó que actualmente el edificio presenta los riesgos de un edificio abandonado, con una estructura ya obsoleta, pero sin riesgos de que se caiga. “Tiene que consolidarse para amarrarlo en primer lugar, antes de empezar la construcción de lo que es nuevo. Se va a aprovechar, hasta donde sea posible, todo el material y la estructura existente. La fachada es lo primero que se va a fijar, habrá que cambiar elementos, pero en lo posible se conservarán todos los elementos originales”.
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